Así se prepara Mendoza para una falta grave de agua

En el periodo 2019-2020 habrá 11% menos de agua. La provincia lleva más de una década con escasez hídrica.

Así se prepara Mendoza para una falta grave de agua

Por:Matías Sosa
Periodista

Mendoza debe tomar dimensión de la situación crítica que atraviesa por la escasez hídrica. Hay preocupación de los organismos oficiales porque habrá agua que el periodo anterior. El Gobierno presiona para que se apruebe el Plan de Sequía y les piden a los usuarios responsabilidad.

La situación actual

La provincia está en un periodo de escasez hídrica, que se da cuando el caudal de los ríos es menor que la media histórica. La provincia lleva un periodo prolongado de once años con esta situación. Tendrá 11% menos de agua para el periodo 2019-2020 con respecto al anterior.

El déficit hídrico se da cuando el agua no alcanza para todos los pedidos. ¿Está pasando? No, a pesar que a varios agricultores sí les sucede, pero porque "se riega y se distribuye mal" según las autoridades.

"Cada 100 litros que sacan del dique, 50 litros llegan a las plantas y los otros 50 se pierden, a veces en la finca misma. Todavía no tenemos déficit hídrico", explicó al POST el Superintendente del Departamento General de Irrigación (DGI), Sergio Marinelli.

Marinelli, titular de Irrigación.

La sequía se da cuando el déficit hídrico es continuo y cuando hay afectación de las plantas, de los cultivos y hay daños económicos. "Si no hacemos nada, va a pasar", agregó.

A futuro los planteos rondan sobre el cambio climático (irreversible, aumento de temperatura, disminución de lluvias y de tormentas de nieve en alta montaña) o una variabilidad climática (de iguales características pero en un ciclo de larga duración). En cualquiera de los dos escenarios, Mendoza está en una situación crítica.

El Plan de Sequía

A mitad de octubre de 2018, el Gobierno envió a la Legislatura los lineamientos del proyecto de Ley del "Plan Sequía". Tenía como objetivo minimizar los impactos sociales, ambientales y económicos de eventuales situaciones de sequía.

Actualmente sigue en la comisión de Obras y nunca se trató en el recinto. El gobernador Alfredo Cornejo, expresó en las últimas horas su enojo y pidió apoyó para que sea aprobado en la Legislatura: "Son cambios legales que son imprescindibles que se aprueben en la Legislatura. Las leyes en sí no generan la felicidad ni va a aparecer el agua porque se apruebe, pero hay que darles instrumentos a Irrigación".

Cornejo pidió aprobar el Plan Sequía. 

Cornejo incentivó que "se hagan las cosas que hay que hacer a largo plazo", como dos diques en el proyecto de Potrerillos y construir Portezuelo del Viento, "porque en los próximos diez años vamos a tener dificultades graves".

Como la Legislatura no aprobó el Plan, Irrigación lo está trabajando por su cuenta. "Podemos hacerlo igual pero era mejor que hubiera un acuerdo político. No tenía nada que ver con lo presupuestario. Era la aprobación de una metodología, de un camino acordado políticamente y que tenga continuidad en política de Estado", explicó Marinelli.

El Plan incluye pautas y estrategias a corto plazo y a largo plazo en los diversos escenarios posibles de sequías. Buscan la eficiencia hídrica.

La escasez lleva años y parece no mejorar. 

Irrigación trabaja, entre otras medidas principales, en minimizar las pérdidas en las redes de abastecimiento; obligatoriedad de la instalación de dispositivos de medición en grandes y medianos usuarios; riego acordado; control de calidad del agua y la activación del RUA (Banco de agua).

A qué se enfrentan los mendocinos

Cada vez habrá menos agua disponible y subirá la demanda por el aumento de la temperatura, más necesidad de los cultivos por el calor y habrá más población.

"Para no caer en el déficit hídrico crónico hay que ser más eficiente. Hay que verificar el riego, distribuir mejor, revestir canales, tener balances hídricos aprobados, aumentar la capacidad de los embalses y dar una batería de medidas con y sin implicancia económica", expuso Marinelli.

  Habrá menos agua para el próximo periodo y la crisis se acentúa.   

Del 100% de agua disponible que tiene Mendoza, el 90% lo usa el agro y la mitad se pierde. Del 7% aproximado que va al consumo humano, entre 50% y 60% se pierde. "El panorama puede ser menos negro si somos capaces de revertir eso, depende de todos", analizó.

"Tenemos que poner sobre la mesa que estamos en problemas. Hay que crear conciencia y cambiar los métodos de educación. Tenemos que tener una metodología de trabajo, que el plan sea lo más consensuado posible, que la política lo tome para tenga continuidad en el tiempo y haya penalidades para los que malgasten el agua", manifestó.

Por ejemplo, el Río Mendoza en un año medio tiene 1400 o 1500 hectómetros cúbicos (hm3) de derrame anual. El nuevo periodo 2019-2020 tendrá 850 hm3, lo que equivale al 60% de un año medio.

El Río Mendoza tendrá 60% de agua comprado a un "año medio".

"De los últimos diez años, sólo un año tuvo la medida media y el resto ha sido muy pobre. El año que viene será muy crítico porque será menor el agua que en otros años. No es grave, es gravísimo. Tenemos que usarla mejor", explicó Ricardo Nordenstrom, subdelegado del Río Mendoza en Irrigación.

Los avisos de Aguas Mendocinas

Las altas temperaturas producen un elevado consumo de agua. Desde Aguas y Saneamiento Mendocinas (AySAM) insisten a la población a hacer un "uso sumamente responsable y solidario de agua potable" y respetar la restricción de 8 a 22 en el Gran Mendoza.

Pidieron evitar el llenado de piletas y riego de jardines internos y externos, además que recordaron que está prohibido lavado de veredas y autos con mangueras o hidrolavadoras.

AySAM pidió revisar pérdidas y goteras.

Recordó que hay que mantener una reserva de agua potable embotellada (dos litros por persona); cuidar el tanque domiciliario; regular la intensidad del caudal en las canillas; evitar el uso de lavarropas automáticos y lavavajillas y controlar goteras en canillas y pérdidas en inodoros.

La táctica que se repetirá

"Tenemos más de 66 mil hectáreas que utilizan el agua para riego. En vez de darle agua a todas juntas y todo el día, le damos tres días de agua a 20 mil hectáreas, luego tres días a otras 20 mil hectáreas y después a las otras 20 mil hectáreas. La gente riega, con suerte, cada nueve días. Buscamos que en las fincas no sobre el agua, que no haya desagües", detalló Nordenstrom.

Se regará por turnos para controlar y regular el uso del agua.

Para el nuevo periodo (de octubre 2019 a septiembre 2020) continuará la modalidad de turnado de 72 horas y se les está informando en estos días a todos los inspectores de cause cómo será la distribución y sabrán cuánta agua tendrán (distintos coeficientes dependiendo de la época del año y las necesidades de los cultivos).

Complicación histórica

A fines de la década de 1960 hubo una escasez parecida, pero no fue prolongada como en la actualidad. Si bien antes podían sumarse varios años "secos" seguidos, luego había varios años con mucha agua y alternaban periodos de subas y bajas. El "actual bajón" no parece repuntar o cambiar.

Observatorio del agua

Cuando se realice la fiesta por el Día Provincial del Agua que es el 20 de noviembre, el DGI presentará un observatorio del agua, que será gratuito y podrá revisarse por internet. Podrá ver cómo se comporta a lo largo del tiempo la cantidad o la calidad del agua en Mendoza. 

Foto portada: @mdz_meteoro / noviembre 2018 - Archivo

Contacto: msosa@mendozapost.com

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