Estacionar en la vereda es muestra de nuestra falta de apego a las normas y nuestra falta de solidaridad.
Somos mendocinos, estacionamos donde queremos... no nos importa nada
Somos mendocinos, está claro. Por eso, nada sorprende cuando se muestran las imágenes que demuestran la falta de solidaridad y de apego a las normas que tenemos. Nos llenamos la boca hablando de ética, moral y buenas costumbres, pero violamos todas las reglas que podemos. El comportamiento que tenemos en la calle es muestra de ello.
Dobles filas, estacionamiento en rampas, cruce de semáforos en rojo, manejo utilizando el celular, etc... todo ello coronado por la peor de las costumbres: estacionar los autos en la vereda, como si fuera nuestra propiedad privada.
Está claro que no lo es: de hecho, está penado por la ley hacerlo. Pero no es lo más importante, sino que bloqueamos el paso de los peatones que quieren circular por ahí. Nos importa tres carajos. Luego, cuando nos quieren multar, encontramos mil excusas para llorarle a los preventores. Somos unos caraduras. Quien lo dude, solo debe ver estas fotos, que se suman a las que venimos publicando hace años, En este caso, de la Cuarta Sección Este, plena capital mendocina: