El trabajo en negro, la otra cara de la desocupación

Gerardo García Oro advirtió sobre "el traspaso de empleados formales a la informalidad".

El trabajo en negro, la otra cara de la desocupación

Por: Agencia NP

El economista investigador del IERAL- Fundación Mediterránea, Gerardo García Oro, alertó que además del aumento de la desocupación "hay un traslado de trabajadores formales a la informalidad", en un proceso que llevó a contar en la actualidad con "5 millones de asalariados en negro".

García Oro analizó la situación del mercado laboral argentino y sus diferencias regionales, luego de que el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) difundiera el índice de desempleo del cuarto trimestre de 2018, que alcanzó al 9,1%.

En ese sentido, señaló las complicaciones para este año, derivadas del hecho que los sectores más dinámicos de la economía no son grandes demandantes de mano de obra, como el agro, la energía y la minería, y que por el contrario, otras ramas como la industria y la construcción "van de la mano con el ciclo económico" y en consecuencia sus trabajadores son los principales afectados por la recesión.

En declaraciones al programa Números Primos, que se emite por la AM 1420 Radio Dime, García Oro indicó también que "en un contexto de recesión es difícil entrar al mercado de trabajo" y que la industria, uno de los principales demandantes de mano de obra, "viene con problemas de carácter estructural desde 2011", afectada por una crisis de competitividad parcialmente subsanada por la reciente devaluación.

A eso se le suma que la tecnificación y robotización generan "un fenómeno de sustitución de mano de obra" que "en un contexto recesivo es difícil de sortear".

El economista de la Fundación Mediterránea relativizó los efectos que pudiera tener el aumento del 46% en la Asignación Universal por Hijo, ya que sostuvo que "de cada diez pesos, ocho vienen del mundo del trabajo" y no de las medidas asistencialistas.

"Si bien ese aumento puede mejorar algo en este semestre complicado, la herramienta por la que se sale es el trabajo", subrayó.

"En un contexto de recesión es difícil entrar al mercado de trabajo"

Una caracterización similar realizó acerca del aumento del salario mínimo: "es bueno que suba, pero si hay un 35 % de trabajo informal, muchos no lo van a recibir", advirtió al respecto.

En otro orden, puntualizó la necesidad de dar un trato diferenciado al mercado laboral de acuerdo con las diferentes realidades regionales y señaló que "no es el mismo esfuerzo el que hace una empresa de la Ciudad de Buenos Aires para pagar el salario mínimo, que es el distrito más rico, que una del NOA o del NEA".

Al abundar sobre ese aspecto, recomendó un análisis más detallado de las cifras de desocupación, debido a que "hay algunos aglomerados donde la tasa de desempleo es del 5 %, pero al analizar la proporción de personas dentro del mercado laboral también es muy baja".