Estos 5 alimentos te protegen de enfermedades invernales

Estos 5 alimentos te protegen de enfermedades invernales

Por: Mendoza Post

 El invierno no sólo se caracteriza por ser la estación con las temperaturas más bajas del año, sino que también por el aumento de las infecciones respiratorias que se intensifican con la exposición a factores biológicos como la contaminación y el ritmo estresante de la vida cotidiana. Pese a ello, algunos cambios en nuestra alimentación pueden ayudar a prevenir este hecho.

La defensa natural del cuerpo contra las infecciones es poseer un adecuado y fortalecido sistema inmunológico. Mediante diversos pasos el organismo se enfrenta y es capaz de destruir bacterias y virus antes de que generen daño. Por tanto, es fundamental reforzar las defensas, ya que si fallan nos hacemos vulnerables del contagio de diversas patologías.

A juicio del Dr. Emma Williams, de la Fundación Británica de Nutrición, “incluir vegetales, frutas y otros productos naturales es la mejor manera de reforzar al sistema inmunitario con las adecuadas vitaminas y minerales”. Especialmente quienes pertenecen a los grupos más expuestos como los recién nacidos, niños menores de 2 años, embarazadas, adultos mayores, personas que usan corticoides (algunas enfermedades respiratorias, trasplantados, entre otros), o personas con VIH.

El invierno ayuda a bajar las defensas 

A continuación, una lista de cinco alimentos ideales para reforzar las defensas y proteger al cuerpo de infecciones o padecimientos:

1. Miel

Es una sustancia que contiene antibióticos naturales, es una gran fuente de energía y es muy eficaz para depurar el organismo. Según experimentos llevados a cabo por científicos de la Universidad de Gales en Cardiff, la miel puede limpiar la bacteria que se encuentra en heridas infectadas y en las superficies contaminadas en los hospitales. “La miel parece actuar descomponiendo las defensas que utilizan las bacterias contra los antibióticos”, sostuvo la profesora Rose Cooper, quien presentó su estudio en la conferencia anual de la Sociedad para la Microbiología General, en Inglaterra. Se recomienda tomar diariamente una cucharada de miel de abejas.

2. Ajo y cebollas

De acuerdo a un estudio del Instituto Tecnológico Agroalimentario, en España, estos alimentos contienen antisépticos naturales, sirven para aumentar las defensas del organismo y actúan como antigripales naturales.

3. Verduras y frutas en general

Lo ideal es consumir diariamente cinco porciones al día. Pueden ser tres de frutas y dos platos de vegetales. Asimismo, es aconsejable priorizar las frutas cítricas durante el invierno. 

En un artículo de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, se menciona que los refriados de la gente que consume vitamina C regularmente pueden durar menos tiempo y, además, sus síntomas suelen ser menos severos. 

Por tanto, si en los meses de invierno tendrás una rutina de actividades físicas exigentes o estarás expuesto a un frío intenso, la ingesta de vitamina C reduce a la mitad la posibilidad de contraer una gripe.

4. Cereales

Alimentos como la avena, el germen de trigo y el arroz son ricos en vitamina B6, la deficiencia de esta sustancia podría disminuir la respuesta del sistema inmunitario. 

Según un estudio de la Escuela de Medicina de la Universidad de Harvard, en Estados Unidos, poseer un nivel adecuado de esta vitamina permitiría que los linfocitos maduren y, de esta forma, se restaure el funcionamiento del sistema inmune. 

Del mismo modo, los cereales tienen selenio que contribuiría a disminuir enfermedades infecciosas en ancianos y favorecería a la recuperación de los niños con infecciones en el tracto respiratorio.

5. Yoghurt

Es un alimento de bajo contenido calórico y fácil digestión. Aporta potasio, magnesio, proteínas, calcio y probióticos, también conocidos como “bacterias buenas”. 

Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), son microorganismos vivos que, cuando se administran en la cantidad adecuada, son capaces de regular la respuesta inmune. 

Por tanto, ayudan a prevenir resfriados y gripes o merman la severidad de los síntomas si la patología no se pudo evitar.

Otras recomendaciones

- Dormir ochos horas diarias favorece el funcionamiento del sistema inmunológico. Al dormir lo suficiente, se reducen los niveles de cortisol, y esto contribuye a que el sistema de defensas actúe óptimamente.

- Reducir la ingesta de grasas. Las dietas ricas en grasa disminuyen la capacidad de respuesta del sistema inmunológico, lo que favorece el contagio de enfermedades.

- Realizar actividad física de intensidad moderada de manera regular. Caminar, nadar, andar en bicicleta o correr son algunos de los ejercicios que se pueden practicar y que aumentarían la función del sistema inmunológico, pues facilitan la eliminación de bacterias de los pulmones y las vías respiratorias. Lo que reduciría las probabilidades de contraer un resfriado o gripe.

Fuente: Guioteca