La vida de un policía vale menos que la mano de un juez

Cómo se tabula la indemnización de un accidente laboral y por qué un juez lastimado cobra más que la familia de un policía muerto.

La vida de un policía vale menos que la mano de un juez

Por:Ana Montes de Oca
Periodista

El presidente Macri dijo ayer que quiere que "la justicia sea la misma para todos, sin privilegios". Pero en Mendoza la muerte de dos policías cumpliendo su deber vale menos que los dedos lesionados de un juez.

Después de conocerse el acuerdo por el cual Provincia ART le pagará al juez Antonio Sánchez Rey $4,5 millones en concepto indemnizatorio porque el portón automático del estacionamiento del Poder judicial le apretó la mano izquierda generándole un 29 % de incpacidad, el caso se convirtió en un escándalo.

No es para menos si tenemos en cuenta que la misma ART desembolsó algo más de $1 millón por cada uno de los policías que fueron asesinados por Sebastián Petean, cuando los atropelló con su camioneta mientras escapaba luego de apuñalar a su pareja.

Los policías Cussi y Ríos dieron su vida 

Carlos Cussi y Daniel Ríos, cumpliendo con su deber, interceptaron con sus motos a la camioneta que había hecho más de 50 kilómetros a contramano por la ruta 82 a 140 km/h. Lo que hicieron no sólo salvó muchas otras posibles víctimas sino que, además, permitió que Petean fuera detenido.

Uno de los policías resultó decapitado por el accidente.

¿Por qué la muerte de un héroe vale menos que un apretón?

"Las indemnizaciones se calculan en base a una tabla que tiene en cuenta, principalmente, el grado de discapacidad fijado por el Baremo de Ley, la edad del accidentado y el sueldo", explicó al Post Gustavo Cairo, delegado en Cuyo de la Superintendencia de ART.

En el caso del juez Sánchez Rey, la SRT (Superintendencia de Riesgo del Trabajo) no homologó un primer acuerdo entre el magistrado y la aseguradora porque habían fijado una discapacidad del 29% y el comité médico le dio 24%. Además, el sueldo sobre el que se basaban en la Superintendencia era cercano a los cien mil pesos y el juez gana más de 250.000. Por eso recurrió a la vía judicial. El hijo de Sánchez Rey, que fue su abogado, había pedido incluso resarcimiento por daños psicológicos.

En este portón el juez se apretó la mano.

A los policías no se les computó daños psicológicos, solamente cobraron por una discapacidad del 100% porque, para la tabla, la muerte es una discapacidad total.

Inflar y cobrar

Lo cierto es que, según un estudio de la Unión de Aseguradoras de Riesgos de Trabajo de fines del año pasado, los peritos judiciales elevaban el porcentaje de discapacidad en un promedio del 18,2% respecto de las comisiones médicas. Esto, si se toma en cuenta que cada punto equivale aproximadamente a $24.000, significa un dineral.

Pero hay otro dato: los peritos judiciales que determinan la incapacidad cobran un porcentaje de la indemnización del accidentado. "Los honorarios de los peritos son cerca del 4% de la indemnización que se homologue, eso no pasa en ningún país del mundo, por eso ahora en la reforma del Código Procesal Laboral se quiere cambiar y hacer un cuerpo de peritos del Poder Judicial o que se cobre honorarios fijos", explicó Cairo.

El juez Sánchez Rey se movió dentro de la ley. Pero además de que la causa haya caído en su propio tribunal y, aunque él se haya excusado no lo hicieron sus compañeros, es claro que ningún ciudadano común consigue un acuerdo indemnizatorio en tan poco tiempo. 

Y es claro que una tabla que mide el valor de una vida menos que una muñeca lastimada porque el sueldo del que usa la mano es más alto que el que pone el cuerpo, es una escala que hay que reconsiderar de manera urgente.