María Alexandra Gómez detalló lo que ha podido saber sobre Nahuel Gallo de manera extraoficial.
Desgarrador testimonio de la pareja del gendarme secuestrado en Venezuela
María Alexandra Gómez abandonó Venezuela con su hijo en un operativo secreto. El Ministerio de Seguridad organizó la salida. Su pareja, el gendarme argentino Nahuel Gallo, quedó detenido en ese país desde diciembre.
Gómez habló públicamente por primera vez después de su salida del país caribeño. Se refirió a que toda la información que obtuvo sobre Gallo fue "extraoficial". Señaló que un preso político liberado le indicó que Gallo estaba en la cárcel El Rodeo. "Sí, lo conocí hace cuatro meses. Estuvimos en el mismo pasillo, me lo encontraba en el patio", aseguró el ex detenido, según Gómez. No recibió confirmación oficial por parte del gobierno venezolano.
Durante tres meses, Gómez se presentó en la prisión donde creía que estaba su pareja. Describió el operativo de seguridad dentro del penal: "Estaban uniformados, todos encapuchados, con máscaras, con unos lentes, con armas largas, todos vestidos de negro". Dijo que mostró su identificación y explicó: "Soy la pareja de Nahuel Agustín Gallo, ciudadano argentino. Fue detenido el 8 de diciembre, sé que él está aquí". Afirmó que los agentes le preguntaron cómo lo sabía. Respondió: "Porque el fiscal general me lo dijo". Luego de ser retenida por una hora, recibió como respuesta: "No está. Que pase buen día".
Gómez explicó que su hijo reconoce a Gallo en fotos. "Lo que más puedo hacer es mostrarle fotos de Nahuel, mostrarle videos para que escuche su voz", dijo. Añadió: "Cada vez que ve una foto, lo reconoce. Dice ‘papá'".
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También habló sobre la culpa que siente por haber viajado a Venezuela. Contó que expresó su deseo de regresar al país y que Gallo apoyó la idea. "Hace poco más de un año, me entró una extrañadera por Venezuela. Y Nahuel me dice: ‘Vamos a hacer algo. Yo voy a hacer que vayas'". Relató que Gallo deseaba reunirse con ella y con su hijo. "Decía: ‘Cuando yo esté ahí, con el bebé'. Y yo le decía: ‘Quiero que vengas'". Afirmó que ese deseo pudo haber influido en la decisión que llevó a la detención.
Sobre el momento de la captura, recordó una llamada. "A las 10:57 de la mañana, nunca se me olvida, recibo esa llamada de Nahuel: que lo ayudara". No logró obtener más información. "¿Pero quién te está llevando?", preguntó. La comunicación finalizó. Luego, un remisero colombiano que lo había acompañado le dijo: "Señora, pierda cuidado, pero a su marido se lo está llevando una camioneta negra con el rotulado de la DGCIM. No sé qué hacer, no sé cómo ayudarla. Pero me mandaron a irme".
Esa fue la última vez que tuvo noticias directas de Gallo. "Me llama del número del remisero. Yo devuelvo la llamada", explicó. "Esa fue la última vez que yo escuché a Nahuel, y fue pidiéndome ayuda. Y eso es lo que me tortura a mí, todos los días".
Finalmente, Gómez expresó lo que le diría a Gallo si supiera que él la escucha: "Que no he dejado de buscarlo, ni un segundo. No te he dejado de querer. Todos los días le hablo a tu hijo de ti. Todos los días sueño contigo: que me llamas, que te liberaron. Ese es el sueño más nítido que tengo".
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