Israel atacó este lunes la prisión de Evin en el norte de Teherán, un poderoso símbolo del sistema de gobierno de Irán, en lo que Israel calificó como su bombardeo más intenso hasta el momento sobre la capital iraní, un día después de que Estados Unidos se uniera a la guerra.
Irán reiteró sus amenazas previas de tomar represalias contra Estados Unidos. Sin embargo, aún no lo había hecho de forma significativa más de 24 horas después de que bombarderos estadounidenses lanzaran bombas antibúnker de 13.600 kilos sobre sus instalaciones nucleares subterráneas, mientras el presidente estadounidense, Donald Trump, reflexionaba abiertamente sobre derrocar al gobierno iraní.
We warned Iran time and again: stop targeting civilians! They continued, including this morning. Our response: Viva la libertad, carajo!@JMileipic.twitter.com/pVdlWvCDqQ
— Gideon Sa'ar | %u05D2%u05D3%u05E2%u05D5%u05DF %u05E1%u05E2%u05E8 (@gidonsaar) June 23, 2025
Los precios del petróleo apenas se movieron en el primer día de negociación después de que Estados Unidos se uniera a la guerra, lo que sugiere que los operadores dudaban de que Irán cumpliera con sus amenazas de interrumpir los suministros de petróleo del Golfo.
La emisora estatal iraní IRIB publicó un video que muestra a los rescatistas peinando los escombros de la prisión de Evin, cargando a un hombre herido en una camilla.
El medio de comunicación Mizan del poder judicial de Irán dijo que se estaban tomando medidas urgentes para proteger la salud y la seguridad de los reclusos.
El ministro de Asuntos Exteriores israelí, Gideon Saar, publicó un vídeo en X que muestra una explosión en un edificio con un cartel que lo identifica como entrada a la prisión.
Firmaron un acuerdo para avanzar con un ferrocarril bioceánico que conectará Brasil con el puerto de Chancay, en Perú, clave para el comercio con Asia. El proyecto representa un desafío estratégico para el paso Cristo Redentor y la logística argentina.
Brasil y China firman un acuerdo para desarrollar un corredor ferroviario bioceánico de 3000 kilómetros que unirá el Atlántico con el Pacífico, atravesando Sudamérica y culminando en el puerto peruano de Chancay.