Solo necesitamos 3 ingredientes y listo. Una ventaja de esta preparación es que se mantiene fresca y seca por muchos días.
Cómo hacer el sándwich más rico para salir del paso
Comer al aire libre es una forma muy relajante y divertida para cambiar las comidas cada tanto. Los sándwiches se hicieron para tales situaciones. Si nos remontamos a su origen, fueron creados con el fin de comerse mientras la persona está haciendo otra cosa o está apurada.
Dejando a un lado el sabor increíble, el sándwich de jamón crudo y manteca es muy práctico: parece diseñado para viajar bien, mantener su forma y nunca mojarse. Ambos ingredientes de relleno (el jamón y la manteca) son hidrofóbicos, es decir, son repelentes al agua. Por lo que simplemente no hay agua para que el pan absorba.
En un sándwich con pocos ingredientes, lo importante es usar materia prima de calidad.
Paso a paso
El uso de dos ingredientes ricos y sabrosos significa que no se necesita nada más. Como hay tan pocos ingredientes, lo ideal es comprar con la mejor calidad posible:
-Pan baguette fresco, que esté crujiente por fuera y suave por dentro.
-Una buena manteca (pomada o a temperatura ambiente le da más suavidad).
-Jamón serrano cortado fino.
Ver: Para este día de frío, tres recetas con polenta
Receta
Deberemos cortar la baguette horizontalmente, en lo posible manteniéndola entera o cortándola en segmentos más pequeños si es necesario. Luego esparcir una capa gruesa de manteca en cada lado interno de los panes que van a usarse, y por último colocar el jamón (cantidad necesaria, pero tampoco excederse).
Este sándwich rápido de hacer es ideal para llevar a un picnic.
Cerrar, envolver; y cuando llegue su momento, desenvolver y a comer. Se recomienda no agregar queso, ya la manteca ya le aporta su cremosidad; y tampoco se recomienda agregar vegetales. Al fin y al cabo, la belleza de este sándwich radica en su sencillez.
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