Los tips a tener en cuenta para mantener tus anteojos como nuevos.
Consejos útiles para limpiar tus lentes correctamente
Usar lentes no es suficiente para ver bien: además, hay que mantenerlos en buen estado y no todo el mundo sabe cómo limpiarlos correctamente.
Algunos los limpian usando la ropa, con un pañuelo de papel o con la gamuza que viene en los estuches. Sin embargo, hay algunos consejos que permitirán mantener los anteojos como nuevos.
Es la única manera de disfrutar de una visión impecable y, además, estos tips publicados por el sitio El Español te permitirán prolongar la vida útil de tus lentes.
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Cómo limpiar los cristales de tus lentes
Uno de los trucos más extendidos, y uno de los más eficaces para limpiar los anteojos correctamente, es utilizar agua y jabón neutro. Para ello, abrí la canilla del agua con poca presión y poné los lentes debajo. Después, frotá los cristales con un poco de jabón con mucha suavidad utilizando las yemas de tus dedos. Cuando terminés, aclaralas y secalas con un papel suave o con un paño de microfibra que no deje pelusa.
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Prestá especial atención a la montura cuando realices la limpieza, ya que si tiene bisagras o partes de metal se podrían oxidar si no las secás bien. Este método es el más efectivo cuando los lentes están muy sucias o tienen tierra.
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En caso de que no tengas agua ni jabón y necesites limpiar tus anteojos correctamente, podés utilizar un paño de microfibra o la gamuza que viene dentro del estuche. Porque nadie sabe cuándo se nos pueden ensuciar los cristales.
En este sentido, también es conveniente que laves la gamuza de vez en cuando (podés meterla en la lavadora sin problemas). De hecho, asegurate de que está lavada antes de limpiar las gafas correctamente, de lo contrario, será como si no hubieses hecho nada.
Otra forma de llevar a cabo la limpieza es utilizando aerosoles con ayuda de la gamuza: contribuyen al mantenimiento de los cristales y los conservan limpios durante más tiempo. A veces, incluso incorporan sustancias para evitar que se empañen.
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Otro de los consejos es adquirir un limpiador ultrasónico. Este aparato realiza una limpieza de lentes rápida y efectiva, y consiste en la agitación de partículas de una disolución a través de la energía del sonido. Además, podés utilizarlo también para limpiar relojes o joyas.
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Por último, podés optar por las toallitas húmedas específicas para este fin. Básicamente, realizan la misma función que el spray y la gamuza juntos, aunque la diferencia es que son de un único uso. Es cierto que garantizan unos cristales impolutos todo el tiempo, pero son mucho más caras.
2.Productos a evitar en la limpieza de lentes
Evitá por todos los medios limpiar los cristales de las gafas con la camiseta, sea cual sea el material con el que esté fabricada. La razón es que, si están secos al hacerlo, podrías rayarlos.
Mejor que no utilices tampoco limpiadores como un limpiacristales o el lavavajillas, pues contienen productos químicos que pueden dañar de forma grave los tratamientos de las lentes, como el Clean Coat o endurecido y el antirreflejante.
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Tampoco te recomendamos frotar los cristales con servilletas ni papel higiénico, del mismo modo podrías rayar las lentes por limpiarlas en seco o las dejarás llenas de pelusa. Tampoco intentes abrillantar los cristales con productos que no son específicos para la limpieza de gafas. Además, si tienen arañazos o rayones, solo empeorarás la situación y los harás más visibles.
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Los lentes deportivos son especialmente delicados, así que tené cuidado con los productos que utilicés para limpiarlos, así como con la forma en que las sujetás. Y con los anteojos de sol ocurre lo mismo.
3. Cómo sujetar los lentes para limpiarlos
Lo ideal es sujetarlos por la parte de la montura que estás limpiando. Es decir, si limpiás la lente izquierda, tendrás que sujetarlas por el aro o borde de la lente izquierda. Evitá hacerlo al revés, ya que en caso de que la montura sea al aire podrías romper el puente o el propio cristal. Así, en caso de que la montura sea delicada, evitarás posibles sustos al limpiarlas.
4. Cómo limpiar la montura
Por último, para limpiar la montura te recomendamos que lo hagas del mismo modo que con las lentes, es decir, debajo del agua de la canilla. Eso sí, asegurate de secarlas muy bien después, sobre todo la zona donde se encuentran las bisagras y los tornillos.
Utilizá la gamuza para la limpieza o un paño de microfibra para secarlas, así no quedarán pelusas. Y recordá, evitá a toda costa que quede agua en las bisagras, o podría verse afectado el mecanismo de tus lentes.
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