Garay, el hombre de Cornejo en la Corte

Llega con los proyectos del gobernador "para cambiar lo que funcione mal" en la Justicia.

Garay, el hombre de Cornejo en la Corte

Por:Andrés Pujol
Periodista

Este martes la Cámara de Senadores aprobó el pliego presentado por el Poder Ejecutivo de Dalmiro Garay, y el ex ministro de Gobierno será uno de los siete jueces de la Suprema Corte de Justicia de Mendoza.

La votación finalizó con 28 votos a favor y 9 en contra. Con esto, Garay pasará a ocupar el lugar de Alejandro Pérez Hualde, quien se jubiló y dejará la Corte a partir del 2 de julio.

Ver también: Dalmiro Garay pasó el filtro de senadores y ya es ministro de la Corte

Desde palabras al gobernador Alfredo Cornejo, pasando por su opinión sobre el aborto, el garantismo, el aborto, la ampliación de la Corte y el uso de la fuerza pública: el flamante funcionario del Poder Judicial dialogó con el POST y tocó casi todos los temas de la coyuntura de Mendoza.

-¿Qué sensaciones le quedaron tras la votación?

-Tranquilidad, una votación secreta y era complejo saber qué iba a pasar, a pesar de que conocíamos algunos apoyos. 

Dalmiro Garay, de ministro de Gobierno a juez de la Suprema Corte.

"Un poco de angustia por lo que se va a dejar. Esto es un gran desafío para mí como profesional del derecho, espero estar a la altura de las circunstancias. Pensando en la familia que es un cambio de vida el que uno va a tener. Ingresé sabiendo que iba a estar cuatro años como mucho y ahora se van a tener que acostumbrar a este cambio.

-¿Qué le dejó haber formado parte del Poder Ejecutivo?

"Poder haber trabajado en equipo y ver que se pueden cambiar cosas. Hay gente muy valiente ahí, si uno le pone esfuerzo y ganas ve que hay muchas posibilidades de crecer. Encontré mucha gente con ganas de mejorar y que si le damos capacitaciones vemos que son un gran motor para solucionar muchas cosas. Me llevo experiencia con la gente que he trabajado y que espero poder plasmar ahora.

-¿Qué palabras le dejaría al gobernador Alfredo Cornejo?

"Aliento para Cornejo, que siga la línea que él mismo ha trazado. Es un gran gobernador desde lo profesional, una persona que tiene mucho compromiso con lo que hace y es una gran función la que lleva adelante. La verdad que el empeño y las ganas para sus obligaciones están haciendo que la transformación pueda ser llevada adelante. Yo como ministro de la Corte voy a seguir apoyando desde mi lugar, porque esto es un trabajo de los poderes en conjunto.

"Cornejo tiene mucho compromiso con lo que hace", sostuvo Garay.

-¿Qué va a sumar a la Suprema Corte de Mendoza?

-Una visión distinta que está anclada en los proyectos que hemos presentado. Le incluyo ganas para intentar cambiar lo que funcione mal y potenciar lo que esté saliendo bien. Intento trabajar en lo que es un cuerpo colegiado y respaldar a los magistrados para que den frutos en su tarea.

-¿Cuál es su visión sobre el garantismo?

-Muchas veces se lo utiliza de manera peyorativa. No comparto visiones abolicionistas en materia de derechos. El Poder Judicial debe respetar los derechos y libertades de los ciudadanos en todo sentido, así que desde ese lado voy a ser extremadamente garantista.

“Lo que no implica desatenderse de los problemas de la sociedad y entender que muchos de ellos requieren una solución de una visión completa del Estado, no poner en una parte que no está comprometida con la solución del problema. Tenemos que dictar sentencia y fijar la jurisdicción de manera que se respeten todos los derechos y garantías consagrados en la Constitución.

¿Qué opinión le merece el uso de la fuerza pública?

-Tiene un rol disuasivo y persuasivo, que también vinculado la detención del delito. Desde que abandonamos el “ojo por ojo” le dimos al Estado la confianza de que un ente lleve adelante esto. Me parece que en el respeto de las libertades tenemos que encontrar el equilibrio en el uso de la fuerza pública. Esto tiene que usarse de manera razonable para que se respeten los derechos de todos. 

"Lo que no puede pasar es que un derecho se imponga sobre otro de manera que llegue a conquistarlo. Ahí es donde el Estado tiene que estar presente y salvo que se esté in fraganti, no debe actuar. Tiene que haber interacción como se está haciendo como mediadores. De todas maneras, creo que la sociedad ha cambiado en muchos sentidos y se ha llegado a puntos medios.

"Tenemos que encontrar el equilibrio en el uso de la fuerza pública", añadió.

-¿Qué piensa sobre el proyecto de la despenalización del aborto?

-Creo que es histórico el debate en cuanto al proyecto de ley, aunque no me he pronunciado. Ningún partido ha hecho algo partidario de esto y eso es muy importante. Creo que si esto no prospera debería existir la posibilidad de que haya un referéndum. Si prospera y tenemos ley se tendrá que ver caso por caso cómo se aplica.

-¿Va a seguir apoyando la ampliación de la Corte?

-Comparto el proyecto del doctor Juan Carlos Jaliff (senador provincial) porque implica un cambio en el trabajo interno de la Corte. Estamos planteando oralidades, pero eso ya es una decisión que deberá tomar el Poder Legislativo. 

"Comparto el proyecto de Jaliff, pero ya es decisión del Poder Legislativo", cerró Garay.