Nueva prueba para Massa: el primer canje de deuda clave de 2023

Buscan aliviar vencimientos del primer trimestre del año por 4,3 billones de pesos. Qué bonos ofrecerán a los inversores.

Nueva prueba para Massa: el primer canje de deuda clave de 2023

Editó: Mariano Rivas

Este martes 3 de enero, Sergio Massa tendrá su primera prueba importante de 2023: afrontará un canje de deuda para descomprimir vencimientos por un monto de $4,3 billones.

El Gobierno nacional buscará así estirar los vencimientos y llegar mejor parado a las elecciones de este año. El volumen del canje de este martes supera a los dos anteriores que hizo el actual Ministro de Economía. Uno fue el 9 de agosto de 2022, a pocos días de asumir; el otro, el 10 de noviembre.

Ofrecerán a inversores bonos ajustables por inflación, a través de los que se buscará postergar el pago de letras del Tesoro que vencen a lo largo del primer trimestre.

Solo en enero, el Tesoro tiene que enfrentar vencimientos de deuda en pesos por $1,1 billones, de los cuales $800.000 están en manos del sector privado. Los bonos a canjear vencen en el primer trimestre e incluyen LECER, LEDEs, BONCE y BOTEs.

Los vencimientos son por un monto de 4,3 billones de pesos.

Para conseguir la adhesión de los tenedores a estos bonos, el menú a ofrecer es mayor que en anteriores licitaciones. Habrá títulos de descuento en pesos a corto plazo, como bonos duales para cubrirse de la inflación y de las variaciones del tipo de cambio y papeles para que los bancos usen como encaje, resumió Infobae.

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Detrás de la licitación de este martes está la intención del oficialismo de estirar los vencimientos hasta febrero de 2024, en un contexto en el que ya asoma en el horizonte el "muro" que son las PASO de agosto. Es que todavía dura el recuerdo de lo que fueron para el mercado los días siguientes a la victoria de la fórmula Alberto Fernández-CFK en las primarias de 2019, con una corrida cambiaria traumática.

El Gobierno busca estirar los vencimientos hasta después de las elecciones de este año.

Uno de los secretos para el éxito de estos canjes es que el sector público tiene cerca del 60% de los bonos emitidos por el Tesoro, incluyendo al Banco Central, entes oficiales como ANSES y bancos públicos. Por lo tanto, para medir la participación de los privados es fundamental que se supere ese umbral.

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