Bitcoin esquivó la crisis de BUSD y una cruz dorada puede traer buenas noticias

 Bitcoin aguantó, se recuperó y terminó saliendo victoriosa tras una semana complicadísima que había visto caer su precio un 11% en apenas tres días, luego del cimbronazo provocado la semana pasada por el gobierno de los Estados Unidos, cuando puso en jaque a BUSD (Binance dólar), la criptomoneda estable de Binance que cotiza 1 a 1 con el dólar y representa al exchange más grande del mundo.

Para hacerlo corto, la SEC (Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos) notificó a Paxos, la empresa que emite la stablecoin BUSD, que estaba incurriendo en un fraude, porque considera que BUSD es un valor no registrado ya que fue creado a partir de un contrato de inversión que genera beneficios económicos y por lo tanto debería haber tramitado la autorización pertinente del órgano regulador, que es la SEC, para poder operar.

Conclusión: el golpe a BUSD provocó que Bitcoin se viniera abajo con el resto del mercado de criptomonedas, mientras Paxos frenó en seco la emisión de BUSD y los traders empezaron a sacársela de encima de modo urgente, aunque la cripto convertible con el dólar, se estabilizó con éxito en las siguientes 48 horas.

El derrape de bitcoin, que el último domingo 12 de febrero se había agravado con una caída del 14,5%, cotizando a U$S 21.351, dio un vuelco épico para traccionar toda la semana al alza, en la que aumentó un 20% y marcó el máximo precio registrado del último semestre, alcanzando los U$S 25.250.

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La levantada de BTC alejó los temores sobre las redadas que el gobierno estadounidense ha lanzado sobre las criptomonedas, puntualmente ahora sobre BUSD, mientras denunció también por fraude al creador de las fallidas criptos UST (Dólar Terra) y LUNA, que causaron el criptocrash de mayo pasado.

Las señales que llegaban desde el país del Norte y del criptomundo no eran muy alentadoras. El dueño de Binance salía a declarar por Twitter, como si él no tuviera nada que ver, que BUSD no era una criptomoneda de Binance sino de Paxos y que solo llevaba el nombre del exchange.

Una respuesta poco saludable de CZ, cuando cualquiera que tenga cuenta en Binance sabe y entiende porque así lo hace el exchange, que BUSD es la criptomoneda estable de la casa de cambios, sin lugar a dudas, y de hecho, Binance se encarga de promocionarla las 24 horas.

Por otro lado, la SEC acusaba al genio surcoreano Do Kwon, dueño de Terralabs y creador de las criptomonedas UST Terra y LUNA, de ser el responsable de un gigantesco fraude que desató el criptocrash de ambas y además, de haber desviado en medio del desastre, unos 10 mil bitcoins a sus bolsillos protegiendo sus fondos en una cuenta en Suiza. En aquel momento, mayo del 22, esa cantidad de BTC equivalía a unos U$S 400 millones.

En fin, entre el dueño de FTX (Sam Bankman Fried) a punto de ir preso, el de Terra y Luna buscado, acusado de vender una farsa y haberse mandado al bolsillo 10k de BTC y el dueño de Binance diciendo que BUSD no es de él ni de su exchange, el prestigio del criptomercado cuenta con señales muy poco saludables cuando el primer mandamiento de los negocios es la confianza, además de la transparencia, dos valores sagrados para la comunidad cripto.

Aun así, en este panorama, bitcoin logró tirar el lastre y volver a la superficie con más fuerza. ¿Por qué? Pueden ensayarse algunas explicaciones.

La primera, muy importante, y ligada a la contraofensiva que lleva adelante la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos hacia las criptomonedas. La SEC considera que la gran mayoría de las criptos son valores hay que registrar y necesitan de su autorización para ser emitidas.

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En cambio, la SEC ya ha dicho que Bitcoin no es un valor de registro, no es producto de un contrato de inversión para generar ganancias a partir del esfuerzo de otros.

Por lo que, BTC queda fuera por ahora de esta cacería de la SEC. lo que lo convertiría en un refugio altamente apetecible, sobre todo ahora que hasta las stablecoin como BUSD (Dólar Binance), USDT (Dólar Theter) y USDC (Dólar Coin) y todas sus similares corren el riesgo de ser ilegales.

Por otro lado, algunos índices técnicos del mercado están dando señales que son verdaderos cantos de sirenas para los inversores, no porque sean engañosos sino porque son irresistibles.

Nos referimos puntualmente al Golden Cross o Cruce Dorado que se registró el 5 de febrero pasado, y que cuando ocurre, anticipa un mercado alcista, siempre con requisito previo de confirmación.

El cruce dorado sucede cuando la Media Móvil diaria de 50 días (MM50), es decir el precio promedio diario de los últimos 50 días, en este caso de BTC, cruza por encima de la Media Móvil diaria de 200 días (MM200).

Esta señal alcista ocurrió por última vez el 12 de setiembre de 2021 y vino a confirmar una trepada del precio de bitcoin desde los U$S 30.000 hasta los U$S 69.000, claro está, con las oscilaciones a la baja y al alza durante ese trayecto.

El 13 de enero de 2022, dos meses después que BTC tocara los 69K, la MM50 cruzó de forma descendente a la MM200, quedando por debajo del precio promedio diario de 200 días.

Este cruce, más conocido como el Cruce de la Muerte suele anticipar un mercado bajista, que fue exactamente lo que vino después, y de hecho uno de los peores de la historia.

Con este nuevo cruce dorado que tardó un año en volver, y además, con el precio promedio diario de 20 días cotizando por encima del de 50 días, más la resistencia y recuperación de bitcoin en la semana que pasó a pesar de las malas noticias, muchos especialistas se frotan las manos esperando ver un nuevo ciclo alcista a la vuelta de la esquina.