El partido entre Godoy Cruz y Talleres había entregado poco y nada durante el primer tiempo. Cuando todo se aprestaba para el inicio de la segunda etapa, una agresión al asistente Diego Martín llevó a la suspensión del cotejo.
El juez de línea recibió el impacto de un proyectil en su frente. En la transmisión se lo vio conmovido y afectado por el impacto, junto a un sangrado en su frente.
Tras algunos minutos, la decisión del árbitro Yael Falcón Pérez fue suspender el partido. Frente a las cámaras de la transmisión deportiva, el árbitro dijo "si nosotros seguimos jugando, esto va a seguir pasando".
El expresidente de la Real Federación Española de Fútbol aseguró que la mediocampista le dio su permiso para besarla. Además, declararon dos testigos de la defensa.