El descargo de un jugador de la Selección tras las críticas

Ángel Di María publicó una reflexión en su Instagram. “Fideo” es uno de los que puede perder la titularidad.

El descargo de un jugador de la Selección tras las críticas

Por: Mendoza Post

 Argentina recibió muchas críticas tras el empate ante Islandia en su debut en el Mundial. Entre los jugadores con más voces en su contra está Ángel Di María, quien puede perder la titularidad para el partido ante Croacia.

"Fideo", jugador del París Saint-Germain, no tuvo un buen partido y lleva varios encuentros con la Selección en donde su producción no ha sido la esperada.

Ante las reiteradas críticas que recibió, el rosarino publicó una extensa reflexión en Instagram. “Están los que siguen corriendo cuando les tiemblan las piernas”, es una de las tantas frases que compartió.

Están los que usan siempre la misma ropa. Están los que llevan amuletos. Los que hacen promesas. Los que imploran mirando al cielo. Los que creen en supersticiones. Y están los que siguen corriendo cuando les tiemblan las piernas. Los que siguen jugando cuando se les acaba el aire. Los que siguen luchando cuando todo parece perdido. Como si cada vez fuera la última vez. Convencidos de que la vida misma es un desafío. Sufren, pero no se quejan. Porque saben que el dolor pasa, el sudor se seca, y el cansancio termina. Pero hay algo que nunca desaparecerá: la satisfacción de haberlo logrado. En sus cuerpos hay la misma cantidad de músculos. En sus venas corre la misma sangre. Lo que los hace diferentes es su espíritu. La determinación de alcanzar la cima. Una cima a la que no se llega superando a los demás, Sino superándose a uno mismo.

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Di María fue titular ante Islandia.

El texto completo

Están los que usan siempre la misma ropa.
Están los que llevan amuletos.
Los que hacen promesas.
Los que imploran mirando al cielo.
Los que creen en supersticiones.
Y están los que siguen corriendo cuando les tiemblan las piernas.
Los que siguen jugando cuando se les acaba el aire.
Los que siguen luchando cuando todo parece perdido.
Como si cada vez fuera la última vez.
Convencidos de que la vida misma es un desafío.
Sufren, pero no se quejan.
Porque saben que el dolor pasa, el sudor se seca, y el cansancio termina.
Pero hay algo que nunca desaparecerá:
la satisfacción de haberlo logrado.
En sus cuerpos hay la misma cantidad de músculos.
En sus venas corre la misma sangre.
Lo que los hace diferentes es su espíritu.
La determinación de alcanzar la cima.
Una cima a la que no se llega superando a los demás,
Sino superándose a uno mismo.