Mendoza cierra el 2017 con superávit corriente

Contento pero medido, el ministro de Hacienda de Mendoza, Lisandro Nieri, aceptó que las metas fijadas por el gobierno respecto de las cuentas “superaron las expectativas”. Y aunque dijo que no sabe si da para descorchar un espumante, al menos merece un brindis.

Es que a poco de asumir, el equipo económico de Alfredo Cornejo se había puesto como meta “dejar la Obra Pública en dos dígitos para el fin de esta administración” como contó Nieri en referencia al nivel de inversión. Pero las cuentas se hicieron mejor de lo esperado y Mendoza cierra el segundo año de gestión cornejista destinando poco más del 10% del presupuesto 2018 a invertir en infraestructura.

Dicho en criollo, la plata alcanza no sólo para tapar las goteras y destapar las cloacas, ahora podemos hacer el techo nuevo y, tal vez, ampliar la cocina.

Arrancando el motor

“Cuando asumimos, la provincia tenía un déficit corriente del 7% (es decir que se gastaba 7% más de lo que se ganaba), ahora tenemos un superávit de 1,3%”, puntualizó Nieri, señalando tácitamente que las cuentas se acomodaron más de un 8%. Esto quiere decir que el Estado gasta menos de los que gana, sin tener en cuenta gastos de capital, inversiones, pagos de deuda, o ingresos extraordinarios por préstamos. De todos modos, tener superávit corriente es sano. Un Estado que no lo tiene, se funde de a poco.

Destacó que, además, la provincia ordenó las cuentas con los empleados, con los proveedores y también con los municipios “y esto se hizo sin aumentar la carga impositiva”. "De hecho la lista de los que quieren ser proveedores del Estado es cada vez más larga, lo que te da la pauta de que saben que este gobierno paga a término", remarcó.

Respecto al déficit fiscal (las deudas adquiridas por préstamos), el ministro remarcó el cambio en la composición: “en 2015 el déficit era de $4999 millones, de los cuales 3 mil eran para la obra pùblica. Ahora nosotros tenemos un déficit de 5900, pero se destina a obra pública en su totalidad”.

Por eso, y por los $1040 millones de superávit logrados en el último año, el gobierno se animó y decidió destinar poco más del 10% del presupuesto 2018 a mejorar la infraestructura provincial. “En los últimos años se destinaba entre el 5 y el 6%, y nosotros reservamos $8200 millones para hacer obras”, adelantó.

Respecto del año entrante, Nieri aseguró que el 3% de coparticipación que Anses devolverá a las provincias "es una cifra significativa para la economía de Mendoza". 

Bajarán más impuestos

El responsable de Hacienda recordó que, durante este ejercicio fiscal se bajaron algunos puntos del impuesto a los Ingresos Brutos de 107 actividades, y adelantó que “se bajarán unos puntos más, pero también se agregarán 116 actividades nuevas”. Además indicó que se bajarán los impuestos de sellos a los créditos hipotecarios que es algo que ya se está hablando con el gobierno Nacional.

“Con la Nación también hay un plan para acercar el valor real al valor fiscal de los inmuebles”, algo que desde hace tiempo es necesario porque las diferencias son ridículas.

Finalmente, Nieri dijo que todavía no se animaba a descorchar el espumante pero aseguró que hay motivos para brindar: “Estamos muy conformes, creo que además de equilibrar las cuentas dejamos las bases para que la provincia esté ordenada, con la nueva Ley de Resonsabilidad Fiscal. Pero quiero aclarar que yo preferiría que no tuviera que haber ninguna ley, que cada mendocino sea responsable sin que haya que obligarlo pero bueno, tenemos que dejar las bases”.