Cornejo arrancó en serio y les pegó duro a los gobiernos de Jaque y Pérez

Fue en la presentación de equipos técnicos y propuestas. Dijo que los gobiernos peronistas fueron corruptos e incompetentes. Y que le pidieron una coima a la firma Vale. Se presentó como un “ordenador” de la provincia.

Cornejo arrancó en serio y les pegó duro a los gobiernos de Jaque y Pérez

Por:Ricardo Montacuto
Director Periodístico

Tuvo vocación por la economía, al abrir con los discursos de Enrique Vaquié y Laura Montero. Se presentó a sí mismo como un gestor “de cosas simples” pero efectivas, en contraposición a un peronismo que piensa en “la patria grande” y “se olvida de la chica”. Y delineó en trazos muy gruesos los ejes de la política que piensa aplicar en caso de ser gobernador: orden republicano, “nuestro plan es respetar la ley y la Constitución”, alineamiento con los intereses de Mendoza, orden administrativo y reordenamiento del gasto, exigencia de esfuerzo al empleo público y –consigna muy efectiva y aplaudida- que en las escuelas de Mendoza todos los chicos lleguen a séptimo grado sabiendo leer y escribir correctamente, algo que hoy nadie puede garantizar que suceda. Sin embargo, el lugar en el que más cómodo estuvo Alfredo Cornejo anoche fue en el de la crítica durísima, feroz y sin contemplaciones al PJ en el gobierno provincial. Dijo que las gestiones de Celso Jaque y Francisco Pérez fueron corruptas, e incompetentes: “Roban, despilfarran, y malgastan… yo voy a ser el gobernador que administre bien la plata de todos” dijo en uno de los momentos más calientes de su discurso, que arrancó -típica mala costumbre- tarde, producto del atraso en más de una hora para empezar el acto.

El lanzamiento en la bodega Los Toneles.

La excusa para el festín radical fue la presentación de los equipos técnicos y de una propuesta de gobierno en varios ejes. Pero la mayor parte del tiempo y ante un millar de personas que colmaron la bodega Los Toneles -la gran mayoría candidatos, dirigentes, militantes, y socios políticos de la UCR- Cornejo se dedicó a fustigar al peronismo, marcando un tono de campaña que será difícil de responder.

 “Ahora resulta que los tres precandidatos del FPV se presentan como el cambio y no tuvieron nada que ver con Jaque y Pérez, pero es el mismo equipo desde hace siete años. El que fue ministro, después fue gobernador… el que estaba en la Osep, fue ministro de Hacienda y de Agroindustria… el que no, estaba en seguridad y es vicegobernador… se han estado pasando los cargos y son los mismos… Los mismos que van y le votan todo a Cristina en el Senado… ¡¡Nosotros sí somos el cambio!!” criticó, en lo que pareció un mensaje a quien considera de antemano su rival directo, Adolfo Bermejo.

Escuchando al intendente de Godoy Cruz ante “su” platea, la primera conclusión es fácil. Estrenó el traje de candidato único de la oposición, se dedicó a arropar en flores a sus aliados (en especial al Partido Demócrata) y encendió fuego donde sabe que las llamas van a prender, allí donde ve debilidades del peronismo: relación con Nación (“la única política no puede ser mendigar”), las obras que nunca llegaron como Los Blancos y Portezuelo, el alineamiento automático con Cristina, y la falta de apego republicano. En este aspecto, acusó al vicegobernador Carlos Ciurca de manipular la Junta Electoral para perjudicar al Partido Demócrata y lanzó una catarata de advertencias, casi a los gritos desde el escenario, por la votación del Senado del próximo martes, donde con el turbio sistema de las bolillas negras y blancas, los senadores van a votar los pliegos de tres justicialistas para la Corte, el Tribunal de Cuentas y la Fiscalía de Estado. “¡Se van a auto votar!” denunció, en referencia a Ricardo Pettignano y Fernando Simón, dos de los senadores y a la vez postulantes al Tribunal y la Fiscalía. La restante es Miriam Gallardo, para la Corte. “¡Vamos a ser los guardianes de la transparencia de esa elección!” dijo Cornejo. Aplausos a rabiar, incluso en la heterogénea platea en la que estaban todos los sectores del radicalismo –con pocos cobistas, empezando por Julio César Cleto que estaba en Buenos Aires- y el resto de los partidos. Hasta Roberto Iglesias y César Biffi (los dos candidatos de la UCR en 2011 y 2007) estaban en las primeras filas. Son conocidos los enconos que durante años mantuvieron con Cornejo. “Primero unimos a la UCR y luego nos aliamos a esta gente buena de los otros partidos” exclamó el candidato mirando a la cara a sus aliados.

Cornejo y Montero, exultantes.

Cornejo, acompañado en el escenario por Vaquié (jefe de los equipos técnicos), la candidata a vicegobernadora Laura Montero, el diputado Tadeo García Salazar y la candidata a senadora Daniela García –estos últimos ‘remaron’ la plataforma radical en decenas de talleres- hizo algo inteligente antes de sobrevolar sus propuestas. Apoyó sus críticas en datos crudos: caída en las exportaciones, préstamos del Fondo para La Transformación y el Crecimiento (menos que cualquier banco de Mendoza en tarjetas, comparó) y calidad del gasto. “Una provincia que gasta más en publicidad que en obra pública no tiene destino” advirtió. "El IPV ha sumado a más empleados, para hacer cada vez menos casas" denunció.

Cornejo se mostró anoche como un orador efectivo y un rival difícil. Los candidatos del PJ deberán esforzarse mucho para mostrarse como mejor opción, sobre todo porque muchos de los datos que Cornejo dio son certeros. Claro, habrá que ver qué puede hacer la coalición que conduce en caso de llegar al gobierno. Cuando se es oposición, hacer campaña con el diagnóstico da resultado siempre. Luego, hay que gobernar. Sí fue claro respecto de la transparencia. “Yo vivo en mi casa desde el año 2000. Aquí en Guaymallén tienen un intendente que posee una casa de 9 millones de pesos. El funcionario que crea que conmigo va a tener impunidad, va a terminar de patitas en la calle…” advirtió. La comparación viene a cuento de la fortuna del denunciado intendente Luis Lobos, uno de los tres que competirá en la interna del PJ. Afronta cargos judiciales por corrupción.

El saludo a los aliados. Battagión (PD) y Gutiérrez (CC-ARI) en primer plano.

El show fue completo. Fue interesante en algunos pasajes de Vaquié, Laura Montero y el propio Cornejo, el silencio atento de los que allí estaban, cuando se hablaba de economía. Es obvio que nos interesa a todos saber qué piensan hacer cada uno de los partidos en caso de llegar al poder. Sin desdeñarla, Cornejo se limitó a decir que las mayores herramientas de transformación económica las tiene Nación, y que un gobernador de Mendoza debe ser muy buen administrador, criterioso de los gastos, y con carácter y fuerza para exigir “sin pelear, porque no sirve” las “medidas concretas” que cada sector necesite: frutihortícola, vitivinicultura, turismo o metalmecánica. Se divirtió bastante el postulante del Frente Cambia Mendoza al relatar las volteretas que ha debido dar el gobierno local, metido en el escenario de la economía nacional, ya que durante años hubo funcionarios -no todos- que no podían siquiera pronunciar la palabra “inflación”. Fue menos gracioso cuando gritó a voz en cuello que “¡A Vale hasta le han pedido coima!” . Hablaba, claro, de la megaplanta de fertilizantes en el sur de la provincia, y que se cayó cuando los brasileños decidieron no hacer la inversión.

Las propuestas centrales, los “ejes” de los que habló Cornejo se pueden resumir en promesas de administración prolija, “conservadora”, dijo, de reordenar los gastos de la administración -los improductivos, los “despilfarros”- y redirigirlos a la obra pública, el “respeto a la ley y la Constitución”, y conseguir como primera medida que en las escuelas públicas se aprenda a leer y escribir. Prometió que las subirían a Internet, aunque aquí las adelantamos:

Fue muy entretenido Cornejo cuando desafió a funcionarios que desprecian las pruebas PISA, a conversar con cualquier adolescente al azar, o ir con un chico de quinto grado a ver si sabe dividir, o con uno de séptimo, para determinar si es capaz de leer y escribir correctamente. “Vamos juntos, si quieren…” desafió. Todas sus alusiones a la educación fueron muy aplaudidas. Lo mismo que cuando habló de la seguridad. Dijo que la policía se había vuelto ineficiente e improductiva. Denunció complicidad y desidia policial y judicial, y que él sería el gobernador capaz de liderar a los policías y ordenar a la justicia, para “con Inteligencia Criminal, ir a buscar a los ladrones a sus guaridas”.

Al final, Cornejo parecía un rock star.

También dedicó un párrafo al empleo público, mensaje que será decodificado hasta la última letra por los dirigentes de los gremios estatales. “No permito a los funcionarios que sean amigos de los empleados. Ustedes van a estar por arriba, conduciendo a esas personas que saben su tarea y que deben ser respetadas, pero a las que vamos a exigir trabajo, esfuerzo y servicio público” advirtió. Aplausos de nuevo.

En definitiva, lo que vimos fue a Cornejo en su salsa. 

No hubo un atisbo de dudas en su discurso, es obvio que tiene la vocación de ser el gobernador de Mendoza y que va por ello. Y que para conseguirlo, se va a ensañar con lo que crea contradicciones y errores del peronismo en estos siete años, hasta que el PJ sangre por cada herida que les logre infligir.

¿Le alcanzará para ganar las elecciones? Hay que ver. Habló como alguien que se sabe primero en las encuesta, pero llamó a la militancia a “no bajar los brazos”, porque “no estamos sobrados”.

Alfredo Cornejo arrancó la campaña en Los Toneles con todo. Usó mucho las palabras incompetencia, desidia, corrupción, complicidad, en referencia a la actual gestión y a la anterior. Las próximas semanas serán muy interesantes. Ninguno de los candidatos a gobernador de Mendoza que la UCR ha propuesto en estos años, había empezado las semanas decisivas diciendo que el peronismo roba y despilfarra. Habrá que ver cómo el oficialismo se acomoda al escenario propuesto por el radical. No esperen, hay que advertirlo, gentilezas de ningún tipo.