Gallardo fue blanco de la UCR y el debate dejó perlitas

Los senadores radicales le dieron duro a Miriam Gallardo, la abogada peronista que quiere formar parte de la Corte Suprema de Mendoza.

Gallardo fue blanco de la UCR y el debate dejó perlitas

Por: Mendoza Post

Llegaron los pliegos de los postulantes a tres cargos importantes para la gestión de la provincia a la Cámara de Senadores. Uno de ellos es el de la abogada peronista Miriam Gallardo, para ser parte de la Corte Suprema de la Provincia que generó mucha controversia por su militancia política en el sector azul.

Duras críticas de la oposición.

La posible jueza es actualmente la presidente del Concejo Deliberante de Maipú, departamento del que es oriunda, y ha sido previamente 6 años presidente provisional de la Cámara de Senadores, siempre enarbolando la bandera del PJ. También fue apoderada del partido, hasta las últimas elecciones en San Carlos y Capital el 22 de febrero.

Sobre el Código Civil

Cuando Gallardo tuvo la palabra al final de la audiencia aprovechó para defender esta nueva batería de leyes en la que hizo hincapié en el aspecto humano que tiene el Código nuevo por "el reconocimiento de los derechos personalísimos" y que el código actual "no considera lo humano".

Una pregunta incómoda

Jaliff le preguntó a la postulante qué opinaba sobre la reciente recusación del gobernador al juez Pérez Hualde por usar un criterio partidario para tomar una decisión. A lo que ella contestó que "no corresponde el tema de la recusación a un tema partidario".

Gallardo fue duramente cuestionada por la UCR.


Las perlitas

Pero lo más interesante no fueron las "flores" que recibió; los cuestionamientos de la oposición; o el fuerte rumor de que la votación ya está cerrada en favor de la militante sino las perlitas del debate que dejaron mucho para cuchichear.

Cornejo caliente

Alfredo Cornejo llegó tarde para anotarse en la lista de oradores, aunque se presentó con muchos papeles que hasta en un momento se le cayeron por lo abultado de los documentos.

Uno de los primeros oradores fue el ingeniero Carlos Paoletti, quien se estiró demasiado en formular una pregunta o exponer su postura, según la presidente de la mesa.  Cornejo  habló con la prensa y  dijo:

La presidente parcial

La senadora Carina Segovia (PJ) fue la que estuvo a cargo de presidir el debate, dar la palabra y quitarla, especialmente hizo uso de esta función cuando le tocaba a la oposición exponer una postura.

Fue el senador Jorge Palero (UCR) quien resultó varias veces interrumpido en sus ponencias por Segovia quien le decía: "Debe formular su pregunta". En una de las interrupciones fue Juan Carlos Jaliff (UCR) quien, sin tener la palabra oficialmente dijo: "Cuando habló Benegas (FPV) lo dejaste dos horas".

De negro, la fiel senadora Segovia.


El senador radical Jorge Palero fue el más duro cuestionando los antecedentes académicos de Gallardo. Uno de ellos sostenía que ella había acusado un posgrado que no estaba completo y pidió explicaciones.

Gallardo contestó que había aclarado en el pliego que entregó a la comisión "debo materias del posgrado y la tesis" y leyó la parte del documento que explicaba claramente que el posgrado está en curso.

El tiro por la culata

El Senador Raúl Benegas (FPV) quiso ayudar a la exposición de Gallardo preguntando si ella conocía antecedentes de integrantes de la Corte con militancia política en algún partido y si esa actividad había logrado que las decisiones del supuesto magistrado en cuestión no fueran ecuánimes.

A lo que Gallardo se abstuvo de responder porque considera inadecuado emitir una opinión al respecto.

El senador Benegas enterrándose.


Simultáneos... y contradictorios

Jaliff y Cornejo dieron declaraciones en simultáneo a la prensa luego de la audiencia y mientras Jaliff daba declaraciones a los diarios diciendo que no habían presentado ninguna impugnación en contra de Gallardo, Cornejo por su parte acusaba que sí habían presentado desde el partido una impugnación.

También se hicieron esta mañana las audiencias por Fernando Simón a la Fiscalía de Estado, y para Ricardo Pettignano al Tribunal de Cuentas, ambos también peronistas.