Visitando Bodegas: A16

Enigmático y pujante establecimiento en los parajes de Perdriel.

Visitando Bodegas: A16

Por:Andrea Mendoza Ghinaudo
Diseñadora y bloguera

Debo reconocer que el nombre de este lugar fue el anzuelo que me hizo “picar” para querer conocerlo pero fue el combo completo de buena comida, esmerada atención, calidez humana y deliciosos vinos lo que terminó por completar estas ganas de whasapear, twittear e instagramear a todo el mundo lo bien que se la pasa en la bodega A16.

Ubicados en una mesa bañada por el sol tibio que entraba por la ventana, nuestro almuerzo comenzó picando unas focaccias con salame y queso crema con blend de pimientas y especias.

El chef Felipe Bakos nos agasajó con un Menú Criollo Típico de tres pasos que me gustó mucho porque no se alineaba con los estándares actuales de la comida gourmet que a veces termina siendo una redundancia en varios lugares.

Empanadas cocinadas en horno de barro

Dos empanadas de lomo cortado a cuchillo fueron la entrada que acompañamos con un Sauvignon blanc Punto Ar 2017 con un fuerte aroma a fruta fresca, penetrante. En boca resultó más suave y espontáneamente delicado.

 Filet mignon con verduras confitadas

El plato principal estaba compuesto por un filet mignon con verduras confitadas (léase berenjenas, cebollas y pimientos) junto a champignones saltados con manteca y crocantes de papa delicadamente adornados con una reducción de malbec.

Estos sabores fuertes tuvieron su complemento en dos vinos tintos: un Malbec con dejos de miel y vainilla por un lado y un Blend (Cabernet Franc - Cabernet Sauvignon) que dejaba un lindo picante en la garganta y persistía en nariz por un buen rato.

 Brownie y Rosé Malbec: maridaje perfecto

Para finalizar el postre que llegó a nuestra mesa fue una brownie tibio con granita de limón, arrope de uva y azúcar de rosa. Maridado con un Rosado de Malbec de la línea Auge, que al ser cosechado en la primer semana de marzo es más seco, fresco y con frutas rojas tanto en aroma como en sabor.

  La familia A16

En resumen, les cuento que tienen 3 líneas de vinos:

- Punto Ar: compuesta por Malbec, Sauvignon Blanc y Blend donde el 30 % pasa por barrica. Precios alrededor de $160.

- Auge: compuesta por Malbec, Rosé Malbec y Malbec Noir, que no tiene paso por barrica. Precios desde $170 a $290.

- Apogeo: 100 % Malbec, maceración con hielo seco, 18 meses en barrica de primer uso. No pudimos probarlo, este sería el único punto en contra desde mi visión. Precio $680.

En la visita a la sala de tanques lo más impactante y definitivamente hermoso es darte cuenta que en el ambiente se respira una paz total dada por la música clásica que se escucha en todo momento con el objeto de lograr que los cristales diminutos que conforman el vino se vayan alineando en completa armonía. Y qué decir del Blanc de Noir (todavía no embotellado) que pude degustar.

 Cuidada estética y hermosa música

Como buen amante del arte debo decir que me seduce la conjunción de vino y arte, concepto que está deliciosamente plasmado en todas las instalaciones de la bodega.

El talento de Alfredo Severino se luce en cada rincón y se destaca particularmente en la obra "Piedra Augure" que representa los cuatro elementos en el centro (tierra, aire, agua y fuego) con los doce guardianes que custodian a dichos elementos, cuales “Terminators” a su Sarah Connor y que representan a los signos del zodíaco.

 Obra Piedra Augure de Alfredo Severino

 Los imponentes guardianes


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Twitter: @AndreaMzaG
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Fotos: Gustavo Valles