El panorama de las inversiones eléctricas para Mendoza

Argentina ha tenido, a lo largo de los años,  déficit en cuanto a abastecimiento de energía eléctrica en diversos puntos del país. Esta problemática se agrava en temporada de verano, cuando el uso de los aires acondicionados y otros elementos para amortiguar el calor sobrecargan las líneas. Pero en invierno también, porque las centrales eléctricas funcionan con gas, un recurso que escasea, por lo cual disminuye la generación de energía. 

Al respecto, según publicó La Nación el pasado jueves 15 de julio, existe una serie de proyectos que apuntan a la inversión en energía térmica, nuclear y renovable que producirán hasta un 20% más de energía eléctrica para paliar la crisis y mejorar el servicio en los hogares y en las fábricas. 

Estos proyectos están amparados en la resolución N° 21 del Ministerio de Energía de la Nación que dispone una serie de condiciones para atraer inversiones privadas que oscilan entre 2.600 y 3.000 millones de dólares para generar 2989,3 MW, de los cuales una parte importante se concretaría este año.

¿Y Mendoza?

El subsecretario de Energía y Minería, Emilio Guiñazú, dio al Post detalles de cómo benefician a la provincia, los proyectos contemplados en esta resolución: "Estas inversiones tanto públicas como privadas benefician a Mendoza por diferentes motivos. Mejoran el sistema ofertando más generación de energía y de mejor calidad, mejorando el sistema de transmisión y distribución y también dan empleo de calidad."

Una de las obras ejecutadas en el marco de la resolución N°21 es Anchoris, la central eléctrica ubicada en El Carrizal, diseñada para inyectar energía en uno de los nodos con mayor déficit energético de la provincia y cercano a una zona de gran desarrollo vitivinícola y turístico. Al respecto, Guiñazú detalla: "En las obras de generación térmica, ejemplo Anchoris,  hay una combinación de obras privadas y públicas. Anchoris es una obra conceptualizada por EMESA pero ejecutada por privados. "

En términos prácticos, Anchoris recupera pozos de gas que estaban fuera de funcionamiento, cuyo gas se licua, se lleva hasta la central donde se convierte nuevamente a su estado gaseoso y luego parte a la turbina para convertirse en energía eléctrica. 

Las empresas que invirtieron en esta obra son Galileo Tecnored y ProEnergy, quienes desembolsaron un total de 100 millones de dólares, para el desarrollo de la central y el sistema de transporte desde los pozos, ubicados en Malargue, hasta Anchoris. La sociedad se completó con la Empresa Mendocina de Energía (EMESA) entre las cuales constituyeron una UTE (unión transitoria de empresas - CAMMESA -  y Emesa). 

Otros de los proyectos diseñados de EMESA pero ejecutados por privados son Renovar 1 y 1.5, el programa del Gobierno Nacional para impulsar alternativas de generación energética, con los cuales en la provincia se han desarrollado seis parques fotovoltaicos( Anchoris General Alvear, La Paz, Lavalle , Luján de Cuyo y el  Parque de Servicios Industriales Palmira -PASIP-)  y el primer eólico de la Provincia, El Sosneado.

No obstante, resta aguardar la llegada de un número mayor de inversores privados que continúen financiando obras en materia de energía en la provincia, en el marco de esta resolución del Ministerio de Energía de la Nación.

Anchoris deja regalías a Mendoza por 3 millones al año y un importante ahorro en gas natural.

Por otro lado, cabe destacar una iniciativa de EMESA que es la creación de FOPIATZAT, un fondo fiduciario que se aprobó hace un mes y permite el desarrollo de obras de infraestructura eléctrica pensando en el desarrollo regional. Es decir, el fondo desarrolla las obras, se las cobra al distribuidor y de esta manera el dinero vuelve a la provincia para continuar desarrollando nuevos proyectos. 

Los proyectos de inversión justifican los aumentos en las tarifas, según el Gobierno Nacional.

"FOPIATZAT es justamente un fondo que se ha creado en la provincia para poder autofinanciar obras que se consideren estratégicas y no depender de fondos nacionales. Este fideicomiso será alimentado con parte de las regalías hidroeléctricas, ingresos extraordinarios provenientes del sector petrolero y aportes del ejecutivo provincial. La primera prioridad es financiar 10 obras muy relegadas que refuerzan el sistema de transporte provincial que ya no da más. "El objetivo es tener una planificación sólida y una ejecución que combine lo mejor del Estado y lo mejor de los privados", explica Guiñazú.

Nihuil IV

San Rafael y el sur mendocino es una zona de las zonas más afectadas por la inestabilidad del suministro eléctrico. En los últimos tres años se registraron 700 cortes de luz. Por tal motivo, la línea de alta tensión, Nihuil IV, ha sido clave para paliar la situación.

Esta obra dispuso la ampliación de las estaciones transformadoras, la colocación de casi 30 kilómetros de línea aérea de alta tensión en 132 kilovatios y la construcción de 2 kilómetros de línea subterránea de alta tensión. Hasta el momento, San Rafael era una de las pocas ciudades con más de 100 mil habitantes que poseía un sistema eléctrico de una sola entrada, lo que generaba inestabilidad e inseguridad. La obra costó $149.500.000 financiados con fondos provenientes de la venta de energía de la central hidroeléctrica en el Mercado Eléctrico Mayorista Nacional.

¿Estamos listos para el verano?

Los cortes de luz cuando el calor es agobiante son una constante cada año, en Mendoza y en diversos puntos del país. Es importante destacar que desde el Ministerio de Economía, Infraestructura y Energía de Mendoza aclararon que las obras no garantizan que no se corte la luz. Si bien el servicio eléctrico va a tener una mayor estabilidad, aclaran que la distribución depende de los operadores.