Esta es la mayor "estafadora" mendocina del Telar de la Abundancia

A través del Telar de la abundancia una mendocina estafó a cientos de mujeres por cifras millonarias. Dice que trabaja en el Poder Judicial.

Esta es la mayor "estafadora" mendocina del Telar de la Abundancia

Por:Christian Sanz
Secretario Gral. de Redacción (click en autor)

A pesar de los consejos, de las advertencias y las estafas ya cometidas, el Telar de la Abundancia sigue vivito y coleando en Mendoza y otras zonas del país.

No bastan las constantes denuncias que se vienen dando a conocer en las últimas semanas, que incluyen una megaestafa de 7 millones de pesos en La Rioja. Nada parece ser una vacuna eficaz a la hora de detener este flagelo.

El método ya lo explicó el Post sobradamente, de hecho fue el primer medio en dar a conocer el fraude de marras.

Se trata del viejo y conocido sistema piramidal a través del cual unos pocos ganan mucho dinero —los que están en la cima— a costa de muchos incautos que ponen la “tarasca”. De los primeros, hay unos pocos; de los últimos cientos de miles.

La historia que se relatará a continuación es otra más, de las tantas… o no, ya que en este caso ostenta dos condimentos en particular: primero, se trata de una persona que estafó a muchísimas personas, más de lo usual; segundo, esa persona asegura desempeñarse en el Poder Judicial de Mendoza.

No se trata de un dato menor: ¿Quién no confiaría en alguien que se desempeña en un sitio como ese? Dicho al revés, ¿quién se animaría a estafar ocupando un cargo de relevancia en aquel poder del Estado que se dedica justamente a cazar a timadores?

Ver además: La nueva estafa piramidal que llegó a Mendoza

La mujer en cuestión dice llamarse Anahí Zeligueta y se dedica a captar incautos en la zona de Tupungato. Lo hace con envidiable eficacia y ha logrado embolsar mucho más dinero que cualquier otra mendocina dedicada a este menester.

Esta es Anahí Zeligueta

Es que, en lugar de pedir 2 mil pesos y prometer el recupero de 18 mil, la mujer pide de a 18 mil bajo la promesa de que devolverá 200 mil pesosToda una osadía.

Todo empezó a principios de este año, cuando se creó un grupo denominado “Renacer”. Allí, de a poco, empezaron a confluir las mujeres que poco a poco serían estafadas.

Ver además: La Procelac pide cautela sobre el Telar de la Abundancia

Semanas más tarde, comenzaron los reclamos y Zeligueta empezó con las excusas. “Del Renacer hay que esperar a empoderarse, no se devuelve (el dinero)”, dice uno de los tantos mensajes a los que accedió el Post. Son parte de un chat que mantuvo con las incautas a las que poco antes engañó.

En el mismo grupo, les advierte que “nadie las forzó” a ingresar al Telar y, por si hiciera falta, aclara: “No hago milagros yo”.

Acto seguido, reconoce cómo es la mecánica del “juego”, lo cual jamás advirtió de entrada a las mujeres a las que fue captando: “Yo no puedo hacer otra cosa que esperar a que traigan invitadas que las ayuden a avanzar, no tengo una máquina de hacer dinero”.

Una nueva estafa a través de un viejo esquema

De esta manera, queda más que claro que la única manera de generar plata es a través de otras incautas que lo pongan. El hecho de que no funcione el sistema ya no es matemático, sino más bien de sentido común.

Según contabilizó el Post, grosso modo, las damnificadas ascienden a varias docenas de mujeres, lo cual convierte a Zeligueta en la mayor exponente de la estafa en la provincia. Algunas de ellas son las que pueden verse a continuación:

Teniendo en cuenta que a cada una le pidió 18 mil pesos, es fácil deducir que se alzó con más de un millón de pesos, con los cuales logró mejorar ostensiblemente su nivel de vida.

“A mí nunca me dijo que para ganar el dinero prometido tenía que invitar a otras personas, jamás hubiera ingresado si ello hubiera sido así”, aseguró a este diario Alejandra, una de las damnificadas.

A ella se suman varias más, muchas. Como se dijo, este caso está bien lejos de los que denunció el Post a lo largo de este año. Acá, los damnificados son muchísimos.

“Yo tuve que pedir un préstamo para poner las 18 lucas, y ahora me viene con que fue mi decisión la de ingresar al telar, una locura”, sostuvo María, otra de las afectadas por Zeligueta.

A todas les ha dicho lo mismo, de acuerdo a los mensajes de voz y los mensajes de Whatsapp a los que tuvo acceso este diario. El engaño está rodeado de promesas y colores, y luego pronto llega el momento de lavarse las manos. Allí, advierte: “Ya no sos una niñita, sabías lo que estabas decidiendo hacer”.

Cuando se le insiste en que se trata de una estafa, cuando se le pide que reintegre el dinero, llega la negativa y, acto seguido, el bloqueo a través del celular.

“Anahí me prometió que iba a ir recuperando lo que puse e iba a ganar hasta llegar casi a los 200 mil pesos, por eso me metí, era algo sencillo, había que empoderarse nada más”, dijo a este cronista Mónica, una tercera complicada.

El viejo y conocido sistema piramidal

-¿Qué es empoderar?

-Ir subiendo por los pétalos, llegar a ser “agua”.

-Conozco los pasos, se va desde el fuego hasta el agua, pasando por viento y tierra, solo que no sabía que le decían así.

-Sí, a mí Anahí me dijo que iba a cobrar cuando llegara al empoderamiento. Una vez que puse el dinero me dijo que tenía que meter gente. Yo no quiero cagar a los que conozco, preferí perder lo que puse.

-¿No hay manera de recuperar tu dinero?

-No, mirá lo que me pone de hecho (muestra los mensajes donde Zeligueta se lava las manos luego de haberle cobrado). Ahora directamente me bloqueó.

-¿Vos la conocías a esta mujer de antes?

-No, me la presentó una amiga en común.

-¿Por qué confiaste entonces?

-No sé, me pareció confiable por cómo hablaba, porque decía que trabajaba en el Poder Judicial, conocí incluso a su hija, que también está metida.

El tema, como se dijo es que no existe nadie en el padrón con el nombre de Anahí Zeligueta. Tal vez se trate de María Edith Zeligueta, quien apareció escrachada en El Cronista Comercial el 11 de febrero de 2008 en el marco de su propia quiebra. Los detalles fueron publicados de esta manera:

Dirección: Vélez Sársfield 254, San Martín, Provincia de Mendoza. D.N.I: 12.420.769. Rubro: empleada del Poder Judicial. Fue proveído su concurso preventivo. Tercer juzgado de Procesos Concursales de la Provincia de Mendoza. Fecha para verificación de créditos hasta 12/3/2008. Informe artículo 35: 8/5/2008; informe artículo 39: 26/6/2008. Síndico designado: Carlos Hugo Romera en Vicuña Prado 32, Rivadavia, Mendoza.

El caso de Mónica se suma al de muchas otras mujeres, que cuentan historias casi calcadas. Todas fueron estafadas en su buena fe y hoy se encuentran agrupadas en un grupo de Whatsapp donde planifican cómo actuar a futuro.

Se debaten entre el "escrache" a Zeligueta o una acción penal conjunta contra ella. Una cosa o la otra... o ambas.

Pase lo que pase, decidan lo que decidan, el mensaje es desalentador. No importa cuántas notas se hagan contra el Telar, ni cuantas denuncias se muestren públicamente, quien quiere creer en este tipo de fraudes, es imposible de detener.