Dos familias destruidas por el femicidio de Julieta González

El hermano de Julieta dijo estar "shockeado" con la detención de Andrés Di Césare, el hijo de su padrino

Dos familias destruidas por el femicidio de Julieta González

Por: Mendoza Post

El hermano de Julieta González, la joven asesinada de un golpe en la cabeza el 27 de septiembre último en un descampado cercano al penal Almafuerte, aseguró estar "shockeado" con la detención del hijo de su padrino como presunto autor del femicidio y pidió que se haga justicia con el crimen de su hermana.

“Andrés Di Césare (23) es hijo de mi padrino”, dijo Marcos González, en referencia al único detenido y acusado de ser el autor material del crimen de su hermana Julieta, y agregó que nunca se imaginó que podía tener relación con el femicidio.

"Nos quedamos muy shockeados, lo siento mucho por mi padrino porque es buena gente”, dijo esta mañana el hombre.

La detención de Andrés Di Césare se produjo ayer al mediodía por efectivos de la División Búsqueda de Prófugos en la esquina de Alsina y Maza, en el departamento de Maipú, cuando se movilizaba a bordo de un auto.

Di Césare, el presumible asesino de Julieta

"Mi mamá sabía algo pero no me contaba a mí, sabía que se conocían, que fueron a comer un día", dijo Marcos, y agregó: “Pido justicia por mi hermana para que descanse en paz, y por mi mamá que hace seis días que no puede dormir por este tema".

Por otra parte, se espera que en el transcurso de la jornada la fiscal de Homicidios, Claudia Ríos, impute por el crimen a Di Césare, quien es hijo de un empresario de la zona.

Ver además: Las últimas horas de Julieta González antes de ser asesinada

Julieta (21) fue vista con vida por última vez el 21 del mes pasado cuando salió de su casa en Maipú para, supuestamente, encontrarse con una amiga con quien nunca se reunió.

Seis días después, tras una intensa búsqueda, el cadáver de la joven fue encontrado por un empleado que manejaba una motoniveladora en un descampado camino al penal de Almafuerte, cerca de Cacheuta, en Luján de Cuyo.

El cuerpo estaba maniatado y vestido con un pantalón negro, suecos y remera animal print, mismas prendas que llevaba la víctima al momento de su desaparición y, según los forenses, Julieta murió por un traumatismo de cráneo compatible con un golpe aplicado con un elemento contundente.