Luego del tiroteo, la búsqueda de los Lanatta y Schillaci mantiene en vilo a policías y también el arco político.
Efectivos de cuatro fuerzas buscan a los prófugos
Mientras los hermanos Lanatta y Víctor Schillaci están siendo buscados por más de 500 gendarmes y otros tantos efectivos de otras fuerzas policiales, más cuatro helicópteros y hasta francotiradores, los periodistas santafesinos que están presentes en la zona aseguran que “están todos perdidos”.
Los efectivos rastrillan zonas de extensos campos sojeros -relatan los portales- tales como: San Carlos, Las Colonias, San Francisco y San Jerónimo Norte para crear un operativo cerrojo alrededor del perímetro provincial. Dicen que la prioridad es que los prófugos no dejen Santa Fe, es decir, pueden estar en cualquier lado.
Uno de los fiscales que interviene por el tiroteo que hubo en la mañana de este jueves con los gendarmes, aseguró que “no tienen nada concreto”.
Gran despliegue de fuerzas de seguridad.
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El operativo está a cargo de Gendarmería por disposición del Ministerio de Seguridad de la Nación, con un comando unificado de las fuerzas federales. Su jefe es el comandante mayor Claudio Brilloni.
Mientras tanto, los fugados son buscados en una amplia zona de campos sojeros, y mientras efectivos santafesinos aseguran que eso facilita la búsqueda porque es zona despoblada y con poca vegetación, los periodistas dicen que ni siquiera han buscado baqueanos que los ayuden a comprender cómo es el área.
Así mismo aseguraron en distintos medios nacionales que no ven movimientos específicos y concretos, sino más bien una espera de órdenes que no llegan.
Hay franco tiradores apostados.
El jefe de la Policía santafesina, Rafael Grau, convocó a francotiradores y nadie se explica adónde se van a apostar, “tal vez en los árboles”, conjeturan.
Entre tanto, la zona de búsqueda se amplía cada vez más así como varían las versiones sobre el modelo de auto que se habrían llevado primero del ataque a los Gendarmes y luego por algunos llamados al 911.
Como si fuera poco, la policía pide a los habitantes de Matilda y zonas aledañas que no salgan de sus casas, pero no están enviando efectivos para revisar si no están escondidos en alguna casa con gente secuestrada.
En definitiva, lo único que se sabe es que hay cientos de policías de al menos cuatro fuerzas distintas, helicópteros sobrevolando una zona donde hay arboledas tupidas, un mínimo de 30 autos y móviles apostados en una ruta sin hacer nada, y ni una sola pista certera.
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